El pasado 14 de julio de 2022 entró en vigor la nueva Ley 15/2022, de 12 de julio, integral para la igualdad de trato y la no discriminación. Esta Ley contempla los motivos por los que un despido es considerado como discriminatorio y, como veremos, entre ellos se encuentra la baja por enfermedad.
La nueva regulación de la Ley 15/2022
Con la entrada en vigor de esta nueva Ley, entre los motivos por los que un despido se considera discriminatorio encontramos, tal como establece el artículo 2.1, que “Nadie podrá ser discriminado por razón de nacimiento, origen racial o étnico, sexo, religión, convicción u opinión, edad, discapacidad, orientación o identidad sexual, expresión de género, enfermedad o condición de salud, estado serológico y/o predisposición genética a sufrir patologías y trastornos, lengua, situación socioeconómica, o cualquier otra condición o circunstancia personal o social”.
Como vemos, esta nueva Ley establece que el despido estando de baja laboral por enfermedad o condición de salud es considerado discriminatorio.
Despido nulo por vulneración de derechos fundamentales
Tal como establece el artículo 26 de esta nueva Ley, “son nulos de pleno derecho las disposiciones, actos o cláusulas de los negocios jurídicos que constituyan o causen discriminación por razón de alguno de los motivos previstos en el apartado primero del artículo 2 de esta ley”.
Si el despido atenta contra los derechos fundamentales del trabajador será nulo, por ende, si te despiden estando de baja será nulo de pleno derecho. Además, también se considera nulo el despido que se produzca durante excedencias para el cuidado de familiares, y durante las bajas de maternidad o paternidad.
El despido será considerado nulo si la discriminación es la verdadera motivación, de lo contrario, si se demuestra que las causas alegadas por el empleador son justificadas, el despido será procedente. Por ejemplo, el despido será procedente si se demuestra que la baja era falsa o simulada.
Consecuencias del despido nulo
La principal consecuencia de que un despido sea declarado nulo es la readmisión obligatoria del trabajador a su puesto de trabajo. Por tanto, el trabajador deberá volver a su puesto de trabajo en las mismas condiciones que tenía con anterioridad al despido.
Asimismo, otras consecuencias de que el despido sea declarado nulo por un Juez son que el empleador deberá pagar al trabajador los salarios de tramitación, es decir, los salarios que el trabajador ha dejado de percibir desde el día que fue despedido hasta la fecha de la sentencia por la que se declara nulo el despido, junto con la cotización de esos salarios a la Seguridad Social.
De igual modo, si se solicita en la demanda de despido nulo, la empresa deberá pagar una indemnización al trabajador por la vulneración de los derechos fundamentales al haber sido discriminatoria la causa del despido, es decir, de probarse la discriminación del despido, se presume la existencia de daño moral.
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